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La empresa Air-e, bajo intervención, precisó que intensifica su lucha contra el fraude energético y detecta múltiples casos de hurto de electricidad en diversos puntos del departamento del Atlántico. Los operativos más recientes se concentraron en Barranquilla, Soledad, Malambo, Galapa, la zona rural de Sabanagrande y Manatí, revelando sofisticadas maniobras para evadir el pago del consumo.
En el corazón de Barranquilla, dos locales comerciales fueron sorprendidos con conexiones ilegales directas a la red, operando sin ningún tipo de medidor. Se trata de un establecimiento dedicado a la venta de muebles y otro de ropa, ambos beneficiándose del suministro eléctrico sin pagar por él.
En Soledad, un popular estadero del barrio Nuevo Milenio fue descubierto con el medidor manipulado para registrar un consumo menor al real, mientras que en Malambo, un consultorio odontológico en El Concord y un estadero en Bellavista también fueron hallados con conexiones directas irregulares.
La inspección en Galapa reveló una situación aún más peligrosa: una plastiquera en el barrio La Florida estaba conectada a un transformador ilegal, lo que representa un riesgo para la seguridad de la zona. En Sabanagrande, una finca avícola en la vía a Malambo utilizaba una conexión directa en su equipo de medición. Finalmente, en Manatí, una oficina de servicios públicos operaba con un suministro eléctrico directo, sin medidor.
Air-e reitera su llamado a la ciudadanía para que utilice el servicio de energía de manera legal y responsable. La empresa recuerda que el hurto de fluidos es un delito que puede acarrear hasta seis años de prisión y multas de hasta 150 salarios mínimos legales mensuales vigentes. Actualmente, Air-e trabaja en conjunto con la Fiscalía en más de 680 investigaciones penales por este tipo de delitos.
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